Una de las cuatro virtudes clásicas de occidente es la
prudencia, es decir, actuar de forma justa, adecuada y cautelosa. Es cierto
que, a veces, puede resultar dificil aplicarla en nuestras acciones cotidianas,
en nuestro día a día, no obstante resulta del todo imprescindible que esté
presente, es más, que se ponga en práctica siempre, en el ejercicio de las
responsabilidades públicas. Pero esto parece tan sólo teoría cuando de lo que
hablamos es de la gestión del síndic Barrera al frente del Conselh Generau d’Aran.
Nadie pone en duda la dificultad de gobernar en tiempos de
crisis como los que vivimos, son necesarias grandes dotes de negociación y perseverancia,
se debe contar con un equipo preparado y cohesionado capaz de hacer frente a
las numerosas dificultades que van apareciendo en el camino. Pero, aunque así
sea, la responsabilidad sobre los ciudadanos y ciudadanas y sobre la dignidad y
rigor de la institución que se gobierna, deben estar por encima de cualquier otra
cuestión partidista y egocéntrica. Eso si realmente se cree que la politica, la
gestión pública, es la búsqueda del bien común.
Estos últimos días he podido comprobar como el Conselh
Generau ha colocado en diferentes iglesias aranesas una placa con el texto: “El
Mgfc. Sindic de Aran, sr. Carlos Barrera Sánchez, inauguró la iluminación
ornamental de esta iglesia el día 28 de septiembre de 2012. Actuación
financiada por la Fundación Endesa”. Puede sorprender que a finales de agosto ya
esté colocada una placa con fecha de finales de septiembre, pero esto sería
sólo la anécdota si no se posee toda la información al respecto.
A primeros de abril de 2011, en la anterior legislatura, el
Conselh Generau, presidido por el sindic Boya, conseguía firmar un acuerdo de
financiación con la Fundación Endesa de 66.000 euros para la iluminación de
catorce iglesias del Valle de Arán, cumpliendo así con uno de los objetivos que
el anterior equipo de gobierno en el Conselh se había marcado: la difusión y
puesta en valor de nuestro patrimonio histórico y cultural.(Ver link)(http://www.conselharan.org/index.php?option=com_content&task=view&id=1192&Itemid=98).
Más tarde, el 16 de junio, el ya entonces sindic en funciones F. Boya, presidió
el acto de encendido de esta iluminación en la iglesia de San Félix de Vilac. (Ver Link) (http://www.conselharan.org/index.php?option=com_content&task=view&id=1215&Itemid=98)
Ahora, tras un año y tres meses del actual gobierno del
Conselh Generau d’Aran, y tras un más que escaso y gris balance de sus acciones
e iniciativas durante este período, el sindic Barrera se otorga el mérito de
estas obras. Unas obras que han sido posibles gracias al trabajo de los técnicos
y al empeño del anterior gobierno del Conselh, así como evidentemente a la
Fundación Endesa. Quizás lo haga, quién sabe, para poder tachar algo de la
lista de pendientes, aunque su gobierno no haya tenido nada qué ver y aunque
eso suponga un flaco favor a la máxima institución aranesa, que debería estar
por encima de los nombres.
Esperemos que, de la
misma manera que el hábito no hace al monje, el tiempo que todo lo juzga, sea
quien dé o quite razones. Aran y su gente bien lo merecen.